No se puede ganar una carrera en la primera curva, pero el domingo fue otro ejemplo de cómo sí puede perderse todo allí.
Los afectados por el incidente de la primera vuelta en el XPEL Grand Prix de Road America presentado por AMR fueron los tres primeros de la grilla: Linus Lundqvist, Colton Herta y Marcus Armstrong.
Lundqvist largaba desde la pole por primera vez en su joven carrera en la NTT INDYCAR SERIES en el No. 8 American Legion Chip Ganassi Racing Honda, y Herta era considerado un favorito antes de la carrera, ya que partía en la primera fila en el No. 26 Gainbridge Honda. Armstrong se ubicaba tercero en la grilla para la carrera de 55 vueltas en el No. 11 Ridgeline Lubricants Chip Ganassi Racing Honda.
Ninguno de ellos salió ileso de esa primera curva.
Lundqvist sufrió un contacto con Armstrong y Josef Newgarden chocó contra la parte trasera de Herta. Los tres primeros autos hicieron un trompo que los relegó al fondo. Herta estaba furioso.
«Josef me acaba de golpear», dijo Herta en la transmisión de NBC. “No entiendo cómo es una penalización para Armstrong justo en frente (de mí) cuando elimina a Lundqvist, pero a mí me hacen lo mismo.”
“Ni siquiera estaba cerca. Me ves desacelerando; (Newgarden) y ni siquiera intentas reducir la velocidad. No entiendo cómo eso no es una penalización. No lo entiendo”.
Newgarden se unió a sus compañeros del Team Penske, Will Power y Scott McLaughlin, en un podio exclusivo para el equipo, el primero desde 2017. El trío de Penske también arrasó con las tres primeras posiciones de clasificación para las 500 Millas de Indianápolis del mes pasado presentadas por Gainbridge.
Power obtuvo la victoria número 42 de su carrera, empatando a Michael Andretti en el cuarto lugar en la lista de todos los tiempos del deporte.
Después del incidente, al final de la primera vuelta, Lundqvist, Herta y Armstrong ingresaron a boxes para realizar reparaciones. Una vez que volvió la verde, Armstrong tuvo que regresar a la zona de pits para cumplir un pase y siga por el contacto con Lundqvist.
Pobre Lundqvist. Su gloria de ganar la pole duró poco y nunca más volvió a estar entre los 10 primeros. Se conformó con un puesto 12.
El día de Armstrong duró sólo 35 vueltas antes de que el equipo Chip Ganassi Racing lo retirara por una falla mecánica. En las “500” debió abandonar luego de seis vueltas. Entre esos malos resultados, apareció su primer podio: el tercer puesto en el Chevrolet Grand Prix de Detroit presentado por Lear el 2 de junio.
Armstrong dijo en la radio de su equipo el domingo: “Soy tremendamente lento. ¿Cuál es mi último tiempo de vuelta? Creo que mi tablero está roto”. Y eso fue todo.
Incluso Pato O’Ward se vio afectado por el incidente de la primera vuelta. Conduciendo por el carril interior en el No. 5 Arrow McLaren Chevrolet, el piloto que salió en el puesto 11 tuvo que escapar a través del césped para evitar los autos de Herta y Armstrong. Salió ileso, pero perdió media docena de posiciones. Después de entrar en boxes, quedó en el puesto 21. Terminó octavo.
«Hombre, sólo quiero un comienzo limpio (de la carrera)» expresó O’Ward. “Quiero pasar la curva 1 sin ningún problema. Simplemente estoy jugando un juego de supervivencia en cada largada… Supongo que eso es lo que obtenemos al clasificar en la mitad del pelotón”.
Herta tuvo el mejor resto de la carrera entre los que tuvieron problemas en el inicio. Aunque cayó hasta el puesto 26, siguió presionando y volvió al sexto lugar al cruzar la bandera a cuadros. Incluso se puso a 3,5 segundos y una posición de su compañero de equipo de Andretti Global, Kyle Kirkwood, quien pasó del cuarto al liderato en medio de la pelea en la primera curva y terminó quinto en el AutoNation Honda Nro. 27.
Aún así, Herta no encontró consuelo en una remontada notable en el circuito permanente de 14 curvas y 4,014 millas.
«Es decepcionante porque es la tercera semana consecutiva -ya sea autoinfligida o no- que pensé que deberíamos ganar y no lo hicimos» aseguró. “La tercera semana consecutiva el Gainbridge Honda ha sido muy rápido y no tenemos absolutamente nada que mostrar por ello. No estoy contento con el sexto lugar con el auto que teníamos hoy y el ritmo que teníamos.
«No sé; no sé qué decir» sentenció.
Herta se salió de la “500” y vio su carrera en Detroit terminar efectivamente cuando se pasó del vértice de la curva 5 tratando de recuperar posiciones que perdió durante los intercambios en boxes cuando cayó la lluvia. Esos resultados fueron 23 y 19, respectivamente.
«Las últimas tres semanas han sido terribles para mí» dijo. «Espero cambiar las cosas y espero tener algo de suerte. Este auto ha sido rápido, el equipo ha sido bueno en las paradas y en la estrategia en cada lugar al que hemos ido hasta ahora».
«No tener una victoria y sólo tener un puñado de podios es, en mi opinión, decepcionante».
Una oportunidad de redención debe esperar un poco. La próxima carrera es el Gran Premio Firestone de Monterey en WeatherTech Raceway Laguna Seca el domingo 23 de junio.
Texto original: Curt Cavin, indycar.com