Dixon supera el caos para ganar la salvaje carrera final de Laguna Seca

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Cuando las cosas se vuelven más caóticas, nadie en la SERIE NTT INDYCAR encuentra un camino fácil hacia el Círculo de la Victoria mejor que Scott Dixon.

Dixon lo hizo nuevamente el domingo, superando una penalización en la parrilla de salida y otra en las primeras vueltas de la carrera, y adaptando la estrategia a múltiples períodos de precaución para ganar el Gran Premio Firestone de Monterey que pone fin a la temporada en WeatherTech Raceway Laguna Seca. Fue la tercera victoria del año y la número 56 en la SERIE INDYCAR para el seis veces campeón, quien ganó en este circuito de 11 curvas y 2,238 millas por primera vez.

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«Un crédito para este equipo», dijo Dixon. “Las cosas se han ejecutado así todo el año. Al principio nos vimos atrapados en un caos. Definitivamente no estoy de acuerdo con la sanción, pero aún no lo he visto todo. Pero no tenía adónde ir. Ganamos; eso es todo lo que importa. Ganamos.»

El Honda No. 9 PNC Bank Chip Ganassi Racing de Dixon cruzó la línea de meta 7s318 segundos por delante del Chevrolet No. 3 XPEL Team Penske del subcampeón Scott McLaughlin para su tercera victoria en las últimas cuatro carreras de la temporada. Alex Palou terminó tercero en el No. 10 The American Legion Honda para cerrar su año de campeonato con Chip Ganassi Racing.

El dos veces campeón de la serie Will Power terminó cuarto en el Chevrolet No. 12 Verizon Team Penske, con Callum Ilott completando los cinco primeros en el Chevrolet No. 77 Juncos Hollinger Racing.

Marcus Armstrong fue el mejor novato, octavo en el No. 11 Ridgeline Lubricants de Chip Ganassi Racing. Eso fue suficiente para asegurar el premio de Novato del Año para el piloto nativo de Nueva Zelanda, y ayudó a CGR a lograr la hazaña sin precedentes de ocupar los dos primeros lugares de la clasificación, con Palou y Dixon, y ganar el título de Novato del Año.

Chevrolet superó a Honda por sólo 12 puntos para ganar el Campeonato de Fabricantes por segunda temporada consecutiva.

El primer obstáculo que tuvo que superar Dixon llegó antes de que ondeara la bandera verde para largar la carrera. Su equipo CGR fue penalizado con seis puestos en la parrilla de salida por un cambio de motor no aprobado después del warm up, por lo que Dixon cayó de su quinto puesto de clasificación al 11º.

Ese punto de partida más bajo puso a Dixon en medio del caos que estalló, cerca de la punta y en todo el centro del pelotón, en la vuelta 1. Cinco autos fueron contados oficialmente como parte de la colisión múltiple en la curva 2.

El auto de Dixon viró bruscamente a la derecha en el tráfico que salía de la curva, conocida como Andretti Hairpin y golpeó el Chevrolet No. 21 Bitnile.com del piloto de Ed Carpenter Racing, Rinus VeeKay, en la grava justo después de la curva 2. Después de una revisión exhaustiva de lo sucedido, los oficiales de INDYCAR sancionaron a Dixon con una penalización de drive-through por contacto evitable. La misma pena fue para el Hy-Vee Honda No. 45 de Christian Lundgaard de Rahal Letterman Lanigan.

Esa sanción enfureció a Dixon, conocido como “El Hombre de Hielo” por su calma bajo presión. Pero se calmó rápidamente en su habitáculo y con el veterano estratega del CGR, Mike Hull, comenzaron a idear tácticas alternativas para acelerar un largo ascenso desde las últimas posiciones entre los autos que aún estaban en la vuelta líder.

Hull y Dixon decidieron ahorrar combustible e intentar terminar la carrera de 95 vueltas en una parada menos que la mayoría del resto. Emplearon una estrategia similar para ganar después de caer al césped en la vuelta 1 del Gran Premio Gallagher el 12 de agosto en el autódromo IMS y ahorraron combustible para ganar la Bommarito Automotive Group 500 presentada por Axalta y Valvoline el 27 de agosto en World Wide Technology Raceway.

Cuando se diseñó, la estrategia de ahorro de combustible era arriesgada porque probablemente requería correr más lento bajo bandera amarilla para llegar a la meta con una parada menos. Dixon tampoco pudo permitir que su compañero de equipo Palou, quien iba al frente mientras lideraba 51 de las primeras 58 vueltas, construyera una ventaja lo suficientemente grande como para mantenerse al frente después de que terminaran los últimos ciclos en boxes.

Llegaron las amarillas que Dixon necesitaba, y algo más. Y una de las banderas de precaución ondeó en un momento terrible para Palou.

En la vuelta 58, el Honda No. 18 HMD Trucking de David Malukas y el Honda No. 29 Sapphire Gas Solutions de Devlin DeFrancesco hicieron contacto lado a lado, con Malukas girando hacia la grava en el escape de la curva 3 para activar la quinta de un total de ocho períodos de precaución, un récord para la carrera.

Palou estaba llegando al final de uno de sus turnos de combustible cuando se desarrolló el incidente, pero no pudo sumergirse en boxes antes de que se encendieran las luces de precaución. Hizo su segunda y última parada en la siguiente vuelta, vuelta 59, y reingresó a la carrera en la 15ta. ubicación a 37 vueltas para el final.

Mientras tanto, Dixon hizo su tercera y última detención en la vuelta 65. Terminó siendo una parada menos que McLaughlin. Mientras tanto, Palou no pudo recuperar suficiente terreno en las etapas finales de la carrera para convertir su estrategia de dos paradas en alcanzar a Dixon o McLaughlin, ya que las últimas 17 vueltas de la carrera transcurrieron en verde a pesar de los últimos cuatro períodos de precaución entre las vueltas 58 y 75.

Dixon tomó la delantera definitivamente en el giro 76 cuando el líder Romain Grosjean entró en boxes por última vez en el Honda No. 28 DHL de Andretti Autosport. Fue uno de los seis cambios de liderazgo entre seis pilotos en una carrera salvaje que contó con 432 adelantamientos en la pista, un récord de la INDYCAR SERIES para este pintoresco circuito que presenta el famoso complejo de curvas “Sacacorchos”.

A partir de ahí, Dixon manejó la brecha después del reinicio final en la vuelta 78 y se alejó en el siguiente tramo de la carrera programada a 95 vueltas sin necesidad de ahorrar combustible.

Dixon dividirá $10,000 con Chip Ganassi Racing y su organización benéfica elegida, St. Jude Children’s Research Hospital, por su victoria como parte del PeopleReady Force For Good Challenge.