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500 millas hacia la gloria: este año presenta historias fascinantes

Y ahora, finalmente, después de meses de espera, llegamos.

Cuando se abran las puertas a las 6 a. m., la 107° Indianápolis 500 presentada por Gainbridge comenzará a mostrar todo su esplendor, una multitud estimada en 325.000 espectadores llena la superficie del Indianapolis Motor Speedway, un espectáculo del deporte motor como ningún otro en el fin de semana del Día de los Caídos.

VER: Grilla de partida

Ya conocen el orden de los tributos previos a la carrera: una invocación, tocar “Taps”, cantar “God Bless America”, el himno nacional y “Back Home Again in Indiana” con un espectacular sobrevuelo de cuatro miembros de la Fuerza Aérea de EE. UU. en sus jets F-16 Viper.

Honrando a América. Celebrando Indy.

Y luego viene el rugido de los motores, con bandera verde prevista para las 12:45 p.m. hora de Indiana.

Una audiencia mundial espera volver a ver un gran espectáculo. Se espera que sea sea la reunión más grande del evento desde la carrera número 100 en 2016, y se espera que siga en la búsqueda de la inmortalidad dentro de los deportes motores.

Para el atardecer del domingo, es probable que un piloto comience con su legado, a menos, por supuesto, que el ganador llegue al Victory Circle por segunda, tercera o quinta vez.

No habrá una valla lo suficientemente alta si Helio Castroneves establece el récord de victorias en las «500». Takuma Sato también puede llegar al grupo de élite si gana su tercera carrera y se convierte en el tercero en hacerlo con tres equipos diferentes. Siete pilotos pueden ganar su segunda imagen en el Trofeo Borg-Warner, el más destacado en ese grupo es Scott Dixon, quien ha estado tentadoramente cerca varias veces desde que se puso la corona de ganador en 2008.

Tony Kanaan, el ganador de 2013, el preferido de la gente, hará que el IMS estalle si convierte su último viaje en un triunfo. Él, al igual que Castroneves, puede convertirse en el ganador de carrera más viejo de la historia.

El Sorteo Internacional, como se llamó originalmente este evento, es súper global. Los primeros seis participantes en esta carrera provienen de seis países diferentes, con una primera fila totalmente europea por primera vez en la historia. En el desglose general, 20 pilotos son internacionales y otros 13 llevan la bandera roja, blanca y azul de Estados Unidos.

Un español larga desde la pole por primera vez, y un argentino compite por primera vez desde 1940. El resto de pilotos son australianos, neozelandeses, japoneses, brasileños, holandeses, daneses, suizos, franceses, canadienses, mexicanos, ingleses y, sí, incluso Hoosiers, es decir, provenientes de Indiana.

Ed Carpenter y Conor Daly son los favoritos locales, y, además, son compañeros de equipo nuevamente en el Ed Carpenter Racing. El titular del equipo competirá por vigésima vez, lo que significa que, de ganar, establecerá el récord de más largadas antes de hacerlo. Dado que su familia fue propietaria del IMS durante más de 74 años, una victoria también sería emocionalmente indescriptible. Daly despertaría emociones similares dado que ha vivido en el centro de Indiana todos los días de su vida, con su padre, Derek, compitiendo en la carrera seis veces y su padrastro, Doug Boles, como presidente de la pista desde 2013.

Katherine Legge ya era una de las nueve mujeres que tomaron la bandera verde en esta carrera, pero está de vuelta en la grilla por primera vez desde 2013 y ahora se erige como la mujer más rápida en la historia del IMS. Sarah Fisher es otra de las mujeres que ha competido en las “500”, y volverá a conducir el Chevrolet Corvette Z06 Pace Car convertible en la carrera.

El último ganador de las «500», Marcus Ericsson, intentará convertirse en el primer piloto en obtener dos victorias consecutivas desde Castroneves en 2002. Un triufo de Christian Lundgaard, David Malukas o el novato Sting Ray Robb romperá el récord de ganador más joven de Troy Ruttman que se ha mantenido desde 1952. El más reciente de los 10 ganadores novatos fue Alexander Rossi en 2016; hay cuatro novatos en esta grilla: Robb, Agustin Canapino, Benjamin Pederson y RC Enerson.

Alex Palou sale desde la pole, lo que es envidiable por muchas razones, pero sobre todo porque es desde donde han partido 21 de los ganadores de las “500”. La historia dice que es mejor largar desde la primera fila, ya que casi la mitad de los ganadores partió desde allí. Eso también es un buen augurio para Rinus VeeKay y Felix Rosenqvist, quienes se combinaron con Palou para formar la primera fila más rápida de la historia.

Hablando de velocidad, este es el tercer año consecutivo en que la grilla se convierte en la más rápida de la historia de la carrera (232,184 mph), siendo Palou el poleman récord con 234,217 mph.

La historia también dice que los conductores deben usar los números del 1 al 7 como números de sus autos, ya que quienes están en ese grupo han ganado 49 veces. El más victorioso es el No. 3, que lleva Scott McLaughlin. El segundo es el No. 2, utilizado este año por Josef Newgarden. Ambos pilotos son empleados del equipo Penske, que busca su victoria número 19 en las «500», para ampliar su récord.

Los dueños del equipo, Chip Ganassi y Michael Andretti, se combinan para tener ocho autos en el campo, y una victoria de cualquiera de ellos sería históricamente significativa. Cada equipo tiene cinco victorias, parte de un empate a tres bandas con Lou Moore por el segundo lugar detrás de las 18 de Roger Penske.

AJ Foyt tiene a los veloces Santino Ferrucci, quien largará desde el cuarto puesto, el mejor de su carrera, y Pedersen, el novato con la mejor posición de largada, en el undécimo. En caso de que gane, Foyt tendrá su mano en una sexta victoria «500», cuatro como piloto y dos como dueño de equipo (Kenny Brack ganó en 1999).

Este es el 30 aniversario del aplastante revés de Bobby Rahal en 1993, la única vez que no logró entrar en la grilla. Para esta edición, su hijo, Graham, también fue eliminado conduciendo un automóvil del Rahal Letterman Lanigan Racing. Durante el Last Chance, Graham estuvo unos minutos dentro de los 33, pero luego fue expulsado por su compañero de equipo Jack Harvey. Sin embargo, ante el accidente de Wilson, estará presente reemplazándolo en el auto número 24 del Dreyer & Reinbold Racing.

La historia a menudo puede ser una guía para el presente, y este año hay sorprendentes similitudes con 1993, una carrera que ganó Emerson Fittipaldi. Ese año, un auto No. 10 de Chip Ganassi Racing estaba en la pole, lo mismo este año también. Había dos conductores llamados Scott, nuevamente una repetición. Un Andretti comenzó 24, que es desde donde Marco Andretti largará el domingo. Hay un piloto japonés y una mujer en la grilla, al igual que entonces, y un brasileño que intenta ganar su segundo “500” partió desde la novena posición. Todo eso es un buen augurio para Kanaan.

Las historias son inmensas y la tradición es rica. Se llama «El espectáculo más grande de las carreras» por una razón. Pronto, volveremos a experimentar de qué se trata.

Texto original: Curt Cavin, indycar.com

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