Sólo ha corrido en cuatro temporadas en la NTT INDYCAR SERIES y en un auto de fórmula, pero Scott McLaughlin fue el piloto de mayor rendimiento del poderoso Team Penske por segunda temporada consecutiva.
El quinto puesto de McLaughlin en la final de la temporada el 15 de septiembre en Nashville Superspeedway lo catapultó a la tercera posición final en el campeonato por segunda vez consecutiva. Es otro capítulo en el notable ascenso del neozelandés McLaughlin, quien compitió por primera vez a tiempo completo en la NTT INDYCAR SERIES en 2021 después de ganar tres campeonatos en el Virgin Australia Supercars Championship de autos de turismo.
«Siento que ahora puedo ser rápido en cada lugar que ya conozco» reconoció. «Me decepciono si no soy rápido, y así es como estoy ahora. Pero así es como se espera de un piloto de Penske».
“Siento que ya tengo suficiente experiencia como para poder empezar a correr en la mayoría de las pistas. Ya sea en una pista nueva, siento que estoy realmente listo para empezar. No me preocupa demasiado”.
Contando las últimas dos temporadas, Josef Newgarden lidera el Team Penske con seis victorias, incluidas dos en la Indianápolis 500 presentada por Gainbridge. Pero McLaughlin le sigue de cerca con cuatro. Su compañero de equipo en Penske, Will Power, suma tres victorias.
McLaughlin lidera la mayoría de las demás categorías. Tiene 26 resultados entre los 10 primeros, frente a los 22 de Power y los 19 de Newgarden, 754 vueltas lideradas, frente a las 739 de Newgarden y las 547 de Power, y siete premios NTT P1, frente a los dos de Newgarden y Power.
Una de las poles de McLaughlin fue en mayo pasado, en la 108va. edición de las 500 Millas de Indianápolis, en lo que fue su segunda pole en un óvalo. McLaughlin obtuvo su primera victoria en un óvalo el 13 de julio en el Iowa Speedway y su segunda victoria en un óvalo el 1 de septiembre en Milwaukee Mile.
Pero hay un factor que separa a McLaughlin de sus compañeros de Penske: los campeonatos. Newgarden y Power han ganado la Astor Challenge Cup dos veces cada uno. McLaughlin busca su primera, diciendo que su equipo número 3, Penske, se siente como los Buffalo Bills de la NFL: una franquicia muy querida lista para abrirse paso y conseguir su primer título después de perder cuatro Super Bowls consecutivos en la década de 1990.
“Estamos cerca, pero no estamos ahí” afirmó. “Somos muy buenos y tenemos una base de fans como ellos”.
El plan para alcanzar esa meta es el mismo para McLaughlin que en las últimas tres temporadas bajas. Él identifica un área de debilidad particular para mejorar.
Esa estrategia ha funcionado. McLaughlin pasó del puesto 14 en puntos en 2021 al cuarto en 2022 y al tercero en 2023. Si bien volvió a ser tercero en 2024, el enfoque en el óvalo dio sus frutos con sus dos primeras victorias en pistas ovales.
«Sabía que podía hacerlo», dijo. «Es cuestión de ponerlo todo junto. Tengo suerte de tener el auto que puedo ponerlo todo junto, pero siento que Ben (Bretzman, su ingeniero de carrera) y yo realmente hemos trabajado para simplificar las cosas y trabajar en lo que funciona para mí y simplemente mantener un paquete de carrera y una sensación del auto muy consistentes».
“Siento que tan pronto como me subo al auto de carreras, lo hago a toda velocidad y estoy justo donde quiero estar. Me siento muy cómodo. Casi me siento tan cómodo, si no más cómodo, en un óvalo en este momento, y eso es algo realmente bueno porque es la columna vertebral de nuestra categoría”.
El área de enfoque durante la temporada baja será la búsqueda de consistencia y la eliminación de errores, lo que McLaughlin espera que sea la última pieza del rompecabezas para un campeonato.
“Puedes tener años en los que piensas, ‘Oh, Dios mío, estuve tan cerca’, y tienes que ir a buscar algo, y luego regresas y lo superas” señaló. “Tuve un año muy similar, el año antes de ganar mi primer campeonato en Supercars. Estuve muy cerca, pero luego regresé al año siguiente, y la primera mitad del año fue un desastre. Terminé ganando el campeonato ese año, pero porque me calmé y lo pensé. Tengo que asegurarme de hacer lo mismo el año que viene».
“Sé que puedo hacerlo. No tengo ninguna duda de que puedo ganar las 500 y también el campeonato. Solo tengo que arreglar algunas cosas y todo irá bien”.
También tendrá otro objetivo muy importante durante esta temporada baja: su primera hija. McLaughlin y su esposa, Karly, dieron la bienvenida a su pequeña Lucy el 10 de octubre pasado.
Texto original: Eric Smith, indycar.com
